El célebre cineasta Francis Ford Coppola imprimió este viernes sus huellas en cemento para legar a la posteridad su figura en la icónica entrada del Teatro Chino, situado en la avenida Hollywood Boulevard y en el que también están representados artistas del calibre de Charles Chaplin, Humphrey Bogart, Marilyn Monroe o Robert de Niro.
Tras medio siglo de carrera a sus espaldas, Coppola está considerado como uno de los directores más influyentes del cine estadounidense gracias a filmes como la trilogía de “The Godfather” (1972, 1974 y 1990) o “Apocalypse Now” (1979).
Con traje gris, camisa blanca y corbata de franjas rojas y negras, el realizador, ganador de cinco Óscar, estuvo acompañado en la ceremonia por familiares y compañeros de profesión, como el cineasta Peter Bogdanovich, la actriz Talia Shire, su esposa Eleanor Coppola, y su hijo, el también director de cine Roman Coppola.
La ceremonia formaba parte de las actividades del Festival de Cine Clásico TCM, que se inauguró el jueves en Los Ángeles y que en su programación hasta el domingo 1 de mayo incluye la proyección de filmes como “All the President’s Men” (1976), “The Big Sleep” (1946) o “Cinema Paradiso” (1988).
Tras imprimir sus huellas, el director asistió a la exhibición en el Teatro Chino de su filme “The Conversation” (1974).





